VIVIENDO MÁS ALLÁ DE NUESTROS MIEDOS

Por eso te recomiendo que no dejes de usar esa capacidad especial que Dios te dio cuando puse mis manos sobre tu cabeza. Porque el Espíritu de Dios no nos hace cobardes. Al contrario, nos da poder para amar a los demás, y nos fortalece para que podamos vivir una buena vida cristiana.

2 Timoteo 1:6-7

Somos tímidos porque tenemos miedo. Tememos el fracaso. Tememos el peligro. Tememos el riesgo. Tememos los errores. Pero como nos recuerda la parábola de los talentos de Jesús (Mateo 25:14-30), ¡estar a salvo por temor en asuntos de fe es muy desagradable para Dios! Debido a que el Espíritu Santo está personalmente dentro de nosotros, porque el Espíritu Santo nos guía, capacita, transforma, habilita, inspira, dirige y bendice, no debemos ser tímidos. La influencia del Espíritu se ve claramente en la liberación del poder espiritual, la práctica de la comunión amorosa y el cuidado, y el discipulado autodisciplinado de los seguidores de Jesús. No seamos tímidos. ¡Seamos audaces en las áreas donde el Espíritu está trabajando en nuestras vidas!

Oración de hoy:

Perdóname, Padre, por las veces que he tenido miedo y timidez al vivir mi fe en Jesús. Pido que el Espíritu Santo me dé valentía santa y sabia mientras vivo para tu gloria, oh Dios. En el nombre de Jesús, oro. Amén.