HÁBITO DE FELICIDAD: REGALA TU VIDA

Si vivo, quiero hacerlo para servir a Cristo, pero si muero, salgo ganando.

Filipenses 1:21

La felicidad viene del servicio y de regalar tu vida. Hasta que comprendas esto, no será feliz durante gran parte de tu vida. La felicidad no viene de la autogratificación. Proviene del auto-sacrificio.

Pablo sabía que para ser feliz, tenía que mantenerse enfocado en su propósito y no en sus problemas. Resumió su propósito en Filipenses 1:21: "Porque para mí, vivir es Cristo y morir es ganancia" (NVI).

Si te pidieran que completaras el espacio en blanco, ¿qué diría? “Para mí vivir es ______.” ¿Sería entretenimiento? ¿Deportes? ¿Ropa? ¿Familia? ¿Amigos? ¿Una carrera? Podría haber muchas cosas buenas que podría responder, pero nada merece el lugar de Aquel que lo creó y te dio Su vida: Jesucristo.

Cómo llenes ese espacio en blanco determinará qué tan feliz eres en la vida. Si responde "dinero" o "éxito" o "placer" o "poder", serás infeliz la mayor parte de tu vida. El problema no es si hay algo mal con esas cosas; simplemente no se merecen el primer lugar. No fuiste creado para hacer un montón de dinero, luego morir y regalarlo. Dios tiene un propósito mucho mayor para tu vida. Solo hay una respuesta que conduce a la felicidad: vivir es Cristo. Regala tu vida. ¡Es tu propósito!